Cuidados
Las cooperativas de cuidados han crecido en la última década. ¿Cuál es el valor añadido de estas cooperativas?
Pilar Rodríguez, presidentea de la Fundación Pilares, ha publicado el artículo “El apoyo a familias que cuidan en su domicilio a personas que necesitan cuidados de larga duración. La experiencia de la Fundación Pilares para la Autonomía Personal”. El artículo forma parte de la Revista Políticas Sociales en Europa Nº 38-39, marzo 2017, páginas 117-138.
Es urgente apoyar a las familias con servicios de asesoramiento, formación y respiro, preferiblemente en el propio domicilio: para personalizar los apoyos, darles continuidad y favorecer el buen cuidado. Desde el Modelo AICP que aplicamos se obtienen buenos resultados para la persona cuidada y para quienes cuidan.
Las comunidades autogestionadas tipo cohousing o viviendas colaborativas desde hace décadas son definidas como modelo residencial donde existe un equilibrio entre vida privada, comunitaria y compromiso social.
Cuidamos contigo, es un Proyecto de la Fundación Pilares para la Autonomía Personal que va a comenzar a desarrollarse en dos Municipios de la comarca de la Vega Baja del Segura: Almoradí y Rojales.
(Guía 1 de la Fundación Pilares) La Fundación Pilares para la Autonomía Personal publica esta innovadora guía dirigida a familias cuidadoras de personas mayores frágiles o en situación de dependencia y personas con discapacidad.
La familia, en particular la mujer, es la que tradicionLa baja natalidad, la baja mortalidad, la elevada expectativa de vida y el consecuente predominio de las enfermedades crónicas y del grupo de personas mayores son las principales características actuales y futuras de nuestra sociedad, epidemiológica y demográficamente hablando. Estos factores conllevan un incremento imparable en el número de personas dependientes que requieren cuidados de larga duración y de las necesidades de asistencia desde los sistemas formal e informal.
La familia, en particular la mujer, es la que tradicionalmente ha asumido la atención a las personas dependientes en el domicilio, dado el carácter sociológicamente familista de las sociedades mediterráneas (Esping – Andersen, 1999). Por un lado, esta situación es insostenible en la actualidad por la fuerte discriminación de género que implica y porque la responsabilidad de los cuidados descansa sobre un grupo de la población cuya disponibilidad es finita, dado el cambio cultural y laboral hacia la igualdad de género en nuestro país (Garcés, Ródenas y Sanjosé, 2003; Gorri et al., 2003).
Todo ello, influye negativamente sobre la calidad de vida y el bienestar psicológico de las personas dependientes, a la vez que también sobre sus cuidadores principales. Es por todo ello, que la carga de los cuidadores informales se ha conformado hoy como un problema sanitario y social que requiere un profundo estudio, a la vez que soluciones adecuadas por medio de programas de apoyo e intervención desde la Psicología, entre otras ciencias. almente ha asumido la atención a las personas dependientes en el domicilio, dado el carácter sociológicamente familista de las sociedades mediterráneas (Esping – Andersen, 1999). Por un lado, esta situación es insostenible en la actualidad por la fuerte discriminación de género que implica y porque la responsabilidad de los cuidados descansa sobre un grupo de la población cuya disponibilidad es finita, dado el cambio cultural y laboral hacia la igualdad de género en nuestro país (Garcés, Ródenas y Sanjosé, 2003; Gorri et al., 2003).