Demografía

En este estudio se analiza la evolución de los estratos de edad en nuestra población, se estudia las repercusiones sobre el mercado de trabajo y los asuntos sociales, se identifican los desafíos y oportunidades derivados del cambio demográfico, y se realizan propuestas desde la perspectiva empresarial.

Año: 2018

Dentro del Informe España 2017, el capítulo 3 corresponde a “Dependencia y cuidados”, donde se revisa y profundiza en las características del cuidado a los dependientes, prestando atención a nuevas fuentes de datos y centrándonos en las edades mayores (65 y más años), donde se produce la mayor proporción de personas con dependencia. Son dos de cada diez mayores, y suponen ya siete de cada diez dependientes en el total de la población.

Año:

La familia, en particular la mujer, es la que tradicionLa baja natalidad, la baja mortalidad, la elevada expectativa de vida y el consecuente predominio de las enfermedades crónicas y del grupo de personas mayores son las principales características actuales y futuras de nuestra sociedad, epidemiológica y demográficamente hablando. Estos factores conllevan un incremento imparable en el número de personas dependientes que requieren cuidados de larga duración y de las necesidades de asistencia desde los sistemas formal e informal.

La familia, en particular la mujer, es la que tradicionalmente ha asumido la atención a las personas dependientes en el domicilio, dado el carácter sociológicamente familista de las sociedades mediterráneas (Esping – Andersen, 1999). Por un lado, esta situación es insostenible en la actualidad por la fuerte discriminación de género que implica y porque la responsabilidad de los cuidados descansa sobre un grupo de la población cuya disponibilidad es finita, dado el cambio cultural y laboral hacia la igualdad de género en nuestro país (Garcés, Ródenas y Sanjosé, 2003; Gorri et al., 2003).

Todo ello, influye negativamente sobre la calidad de vida y el bienestar psicológico de las personas dependientes, a la vez que también sobre sus cuidadores principales. Es por todo ello, que la carga de los cuidadores informales se ha conformado hoy como un problema sanitario y social que requiere un profundo estudio, a la vez que soluciones adecuadas por medio de programas de apoyo e intervención desde la Psicología, entre otras ciencias. almente ha asumido la atención a las personas dependientes en el domicilio, dado el carácter sociológicamente familista de las sociedades mediterráneas (Esping – Andersen, 1999). Por un lado, esta situación es insostenible en la actualidad por la fuerte discriminación de género que implica y porque la responsabilidad de los cuidados descansa sobre un grupo de la población cuya disponibilidad es finita, dado el cambio cultural y laboral hacia la igualdad de género en nuestro país (Garcés, Ródenas y Sanjosé, 2003; Gorri et al., 2003).

Año: 2007
Demografía
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